A veces queremos decorar y renovar nuestro hogar, pero tenemos un presupuesto limitado, lo que nos motiva a hacer muchas cosas nosotros mismos. A veces también, tenemos un gusto muy particular, o muy poco tiempo como para involucrar a terceros. Estas razones, entre otras, podrían hacer que no te sea posible contratar los servicios de un decorador o diseñador de interiores; pero esto no va a evitar que tengas expectativas que quieras realizar para ese espacio que vas a remodelar, aunque tal vez no estés muy segur@ de cómo lo vas a lograr.
Hoy te voy a dar unas ideas del punto de partida: las preguntas que debes hacerte y contestar tu mism@ para que sepas bien los objetivos que quieres cumplir en la decoración de tu hogar. Las respuestas te van a ayudar a elegir los materiales y muebles que realmente necesitas, aunque el sofá en descuento de la tienda (que no entra por la puerta de tu casa) se vea tan tentador.
Estas son las preguntas que siempre hago cuando voy a empezar un proyecto, grande o pequeño:
- ¿Cómo te has imaginado este espacio?
Las respuestas casi siempre van a ser adjetivos o emociones, por ejemplo «Quiero que me de paz», «Me lo imagino muy elegante»
- ¿Qué te gusta y qué quieres cambiar del espacio que vas a decorar/remodelar?
Si tienes eso bien claro tus prioridades van a ser claras también, y vas a saber dónde es más importante dirigir tu presupuesto.
- ¿Cómo y quién va a usar este espacio?
Puede que la sala de estar se utilice solo los fines de semana cuando llegan tus amigos, pero, ¿qué otros usos le puedes dar para aprovechar el espacio al máximo? ¿Tienes la iluminación necesaria? ¿Hay enchufes donde vas a poner el escritorio que tanto necesitas? ¿Lo van a utilizar niños, adultos mayores, personas con capacidades especiales? ¿Tienes mascotas?
También es importante saber si tienes hobbies o actividades especiales que van a requerir espacios para guardar cosas para que se mantengan en orden y accesibles. Toma nota si este espacio podría tener una transformación en un futuro no tan cercano, por ejemplo, una habitación que será oficina mientras los dos terminan de estudiar su maestría, pero que esperan que después de eso sea el dormitorio de un bebé.
- ¿Con cuánto dinero cuentas?
Esto es muy importante, por lo tanto debe ser lo más realista y honest@ posible. Si solo tienes una pequeña cantidad, define bien tus prioridades y sienta las bases para las cosas más grandes en un futuro cercano.
También es importante que averigües bien cuánto cuestan las cosas en tu lista, ya que podrías estar calculando mal algún elemento y luego te vas a llevar la sorpresa que te quedaste sin dinero para las otras cosas que necesitabas hacer. O desde otra perspectiva, puede que creas que un arreglo sale muy caro y te des cuenta que te alcanza para eso y otra cosa más.
- ¿Qué colores prefieres?, ¿Qué colores no te gustan del todo?
También es importante que tomes en cuenta los elementos de la decoración que no vayan a ser cambiados para que los colores de éstos se integren en el nuevo esquema. No vaya a ser que tu amada alfombra persa ya no combine en tu nueva decoración.
- ¿Qué estilo de decoración te gusta?
¿Prefieres el estilo moderno, clásico, ecléctico?
Si no estás segur@, te recomiendo las plataformas de Pinterest y Houzz; puedes hacer una carpeta con fotos de espacios que te gusten mucho y otra carpeta con espacios que no te gusten del todo. Toma nota de los elementos que te llaman más la atención.
Si escribes en el buscador del blog «Escuela de Decoración» podrás conocer sobre muchos estilos que tal vez no conozcas por nombre, pero sabes que es algo que te gustaría tener en tu casa.
- ¿Con cuánto tiempo cuentas?
Puede que quieras hacer esto por etapas, lo cual es bueno e importante definir desde el principio, ya que teniendo un norte claro no vas a hacer inversiones que no se ajusten a la visión total del proyecto. Por ejemplo, no inviertas en cortinas nuevas (aunque las que tienes ya las rasgó el gato) si vas a remodelar la ventana porque necesitas más luz natural.
También es importante definir una línea de tiempo porque habrá cosas que no pasarán de inmediato y es importante saber si tus expectativas son realistas. Por ejemplo, no puedes pretender que la remodelación completa de una cocina esté lista en dos semanas antes del compromiso de tu hija. Planea bien el proyecto e infórmate de los tiempos del proceso con los proveedores expertos.
Espero que estas preguntas te ayuden a establecer un plan de acción y que tu proyecto sea un éxito, recuerda que me puedes escribir a [email protected] para cualquier consulta.